8/4/13

Cierro los ojos,
cierro los ojos y te veo.
Ahí en el jardín,
mirándome,
preguntándote quién soy,
a dónde voy,
por qué estoy ahí.
Yo me acerco,
lentamente,
siento como voy flotando entre las hojas,
el viento me guía.
Y cuando me encuentro con vos,
sin preguntar,
sin decir nada,
te beso.
Entonces el tiempo se para,
los hojas dejan de revolotear,
el viento deja de soplar.
Y es que esa conexión,
que sentimos la primera vez,
es ese sentir,
ese querer,
que tanto buscábamos.

1 comentario:

nicolasfazio dijo...

un poema que escribí hace tiempo...

el- de su cuerpo saco cenizas

ella- la mansedumbre roja de su sexo

el- inventó juegos perversos

ella- sostuvo la mirada complacida

el- entreabrió las manos

ella- sumisa, encorvó su cuerpo

el- sorprendido levantó el suyo

ella- goteando piel

el- bebiendo

ella- casi muerta

el- casi vivo.