18/6/12

Siento como poco a poco
mis hojas se desprenden
mi propio otoño será mi condena
dejándome desnuda
para un crudo y frío invierno
en mi pecho.
Y el dolor se resquebraja
junto a las hojas que yacen en el suelo
aplastadas por la melancolía y la angustia,
mojadas por un monzón que no tiene fin.
Entonces mis ramas se rompen
y mis raíces se achican
ya no parezco yo misma,
sino una piedra
que alguna vez soñó
con ser árbol.

No hay comentarios.: