24/5/10

Día lluvioso, solitario y dormilón. Un domingo como cualquiera, aburrido y sin nada destacable, es decir, he vivido muchos domingos como este en mi vida. Sin embargo, puedo agregar que en estos días mi autoestima se iba ha 6.000 metros bajo tierra y me sentía más sola que nunca. ¿Por qué este domingo tan simple y normal fue tan diferente a los otros? Porque no me sentí sola, no me sentí triste, ni vacía. Me sentí con motivos para sonreír, para escuchar música alegre, para cantar, para dibujar, para no depender del internet.
Tal vez uno desde afuera lo vea como un tema sin importancia "Estarás de buen humor" dirán algunos. Pero no creo que sea algo pequeño. Yo creo que es el comienzo de un cambio, una nueva etapa. Y por lo que veo, parece que es algo bueno.

No hay comentarios.: